la disminución de la temperatura es una de las principales causas de las fallas en la operación del tren turístico de vía estrecha durante el frío invierno. El clima frío hace que los equipos y componentes mecánicos sean más propensos a dañarse o fallar. Por ejemplo, las bajas temperaturas pueden causar que las vías se relajen, lo que provoca que el tren experimente sacudidas y movimientos bruscos durante el viaje; además, el frío puede hacer que los cables eléctricos se vuelvan rígidos y se rompan, afectando el funcionamiento normal del tren. Por lo tanto, antes de operar en invierno, el tren turístico de vía estrecha debe someterse a un mantenimiento completo para garantizar el correcto funcionamiento de los equipos y componentes mecánicos.

las nevadas y la formación de hielo en invierno también son causas comunes de las fallas en el tren turístico de vía estrecha. La nieve y el hielo pueden cubrir las vías, impidiendo que el tren circule con normalidad. La prevención de acumulaciones de nieve y hielo es clave para asegurar la operación segura del tren turístico en invierno. Algunas medidas comunes incluyen rociar una solución de sal para derretir la nieve en las vías, intensificar el trabajo de limpieza de nieve y utilizar dispositivos de calefacción para calentar las vías. Esto puede prevenir efectivamente la acumulación de nieve y hielo, garantizando el funcionamiento normal del tren.

los cambios de temperatura característicos del invierno también representan un desafío para el tren turístico de vía estrecha. Entre las frías noches de invierno y los cálidos días, las temperaturas pueden variar drásticamente. Estas fluctuaciones de temperatura afectan a las estructuras del tren, como las vías de acero, y pueden provocar tensiones que lleven a deformaciones o rupturas de las vías. Por lo tanto, al diseñar y construir las vías se deben considerar y tomar medidas de protección adecuadas para reducir el impacto de estos cambios de temperatura en las vías.